Hoy este espacio digital ha despertado con una inmensa duda que viene de la mano de una crítica situación social en el país. Robos, muertes, inundaciones. Salimos de una y entramos en otra. Desde la política, hasta lo natural. En estos momentos, el arte ha pasado un poco a un segundo plano (más todavía), ya que la gente asidua a la cultura, la música, el cine, entre otras ramas de lo mencionado, ha empezado a preocuparse más por sobrevivir. Puede que suene muy brusco, pero así se siente, quienes están por acá, lo saben.
Pese a todo lo dicho, hay artistas que no han descansado en su ardua labor y han continuado con lanzamientos de sencillos, álbumes, conciertos, buscando una salida a las preocupaciones, aportando desde su trinchera o incluso considerándolo catártico.
Del otro lado del campo, existen artistas que prefieren solidarizarse con víctimas de tragedias, suspendiendo eventos, campañas de expectativa y poniendo en espera sus proyectos.
Desde mi punto de vista, ni más, ni menos. Lo importante siempre será el significado y el contexto con el que uno decide abordar las situaciones. No hay que juzgar a quienes deciden realizar shows, ni criticar a quienes no los hacen para demostrar empatía de esa forma. Lo que siempre hay que tener presente es que hay diferentes momentos, posturas y lidiar con ellas es parte de la vida.
《¿Hacia dónde va el arte en Ecuador?》
Hacia donde nosotros queramos llevarlo, pero siempre pensando en que hay algo más allá del mismo.
Seguimos en la lucha.
Preocupada, pero atenta…
¡La Caracola ha hablado!
Por: Juan José Avilés Navarrete
